
sábado, 30 de abril de 2011
viernes, 29 de abril de 2011
domingo, 24 de abril de 2011
TAMBIÉN EN PINILLOS DE ESGUEVA
También en Pinillos de Esgueva la historia se repite, encontramos un paraje idílico para la vida, un paraje rodeado por poblaciones, a saber, Torresandino, Villatuelda, Terradillos de Esgueva, Pinillos de Esgueva, Cabañes de Esgueva, Cilleruelo de Abajo y Villafruela, y en medio de todos ellos la maravillosa vega del río Henar, y allí, junto al puente de San Pedro, el Gran Castro Celtibérico, hermano de los de Reveche y Zamoyo, otro de tantos en los que no quedó piedra sobre piedra y los pequeños nucleos de población que hoy existen, antes feudos y antes quintas romanas que se repartieron los terrenos en los que habitaban los celtas asentados en la Península Ibérica, los Celtíberos para entendernos, donde se han encontrado sarcófagos de esa cultura prerromana y donde los topónimos al día de hoy entendibles al igual que entonces nos muestran y demuestran que hay que reescribir la historia que escribieron los vencedores de una larga conquista que se produjo en nuestras tierras hace aproximadamente dos mil doscientos años y que hoy podemos observar dando rienda suelta a nuestra imaginación.

DEHESAS DE ROBLEDALES
Estos son unos pequeños restos de las dehesas de robledales que existían en toda Castilla y que después de ser practicamente roturada en su totalidad han quedado como testigos vivientes de una importantísima actividad ganadera que fue sustituida por los casi infinitos campos de cereal de los páramos castellanos.
En los meses de abril y mayo los pájaros que anidan en estos robledales están exultantes y con una frenética actividad y sus gorjeos deleitan nuestros oídos con sus múltiples entonaciones imposibles de reproducir por ningún instrumento musical inventado o por inventar, no se les ve, pero están ahí observando tus movimientos que quiebran su quehacer.
En los meses de abril y mayo los pájaros que anidan en estos robledales están exultantes y con una frenética actividad y sus gorjeos deleitan nuestros oídos con sus múltiples entonaciones imposibles de reproducir por ningún instrumento musical inventado o por inventar, no se les ve, pero están ahí observando tus movimientos que quiebran su quehacer.
Hemos cambiado los rebaños de cerdos que iban a las porqueras a pastar a diario por granjas de cerdos que se hacinan en espacios cerrados donde controlamos la temperatura, la humedad, los microbios... pero que no comen las bellotas de encinas y robles que a la postre se transforman en esos jamones que se reservaban para la siega, hemos cambiado los pollos de corral que se escapaban a la era afanosos en el remover de todos los rincones buscando algún gusano o lombriz por los pollos de laboratorio que salen de las granjas ya cocinados. Hemos cambiado las grandes cañadas por autovías y los rebaños por vehículos a motor en los que viajamos hombres y mercancías sin saber ni dónde ni por qué.
Comerciamos buscando un beneficio, concepto abstracto que se materializa en dinero, a su vez otro concepto abstracto, el cual nos permite vivir un poco mejor y todo esto lo hemos hecho sólos en un abrir y cerrar de ojos. Nos hemos cargado una cultura milenaria y válida en poco más de un siglo y cuando en ese viajar incesante en una cabina con cuatro ruedas nos perdemos por un camino lleno de barro y trabacadas, cuando paramos para otear el horizonte y ver cual es la dirección correcta del camino que llevamos, bajamos de los coches y nos damos de bruces contra una piedra donde alguien ha colocado una teja por la que discurre un chorro de agua fresca que sirve para calmar nuestra sed, levantamos la cabeza y vemos un roble inmenso que por alguien ha sido truncado a la altura de tu cabeza y que por encima de ese corte han salido ramas jóvenes y vigorosas, que cada primavera floran y si hay suerte cuajarán y las bellotas servirán de alimento a algunos animales que a su vez servirán de sustento a ese alguien y su familia y esa rama cortada dará calor en las largas noches de invierno donde la naturaleza que parece muerta está reponiéndose de la asfixia del verano para volver nuevamente con todo su vigor en primavera y completar una vez más el ciclo de la vida.
Y ese chorro de agua que calma nuestra sed y ese roble que nos mira y nos pregunta porqué no cortas mis ramas y moldeas mi vigor, porqué no coges mis frutos, yo que te he ayudado a sobrevivir durante siglos, porqué me has relegado a estas laderas yermas donde no puedes entrar con esos monstruos que has inventado que quiebran el sosiego de todos los seres vivos, incluido el tuyo.

Comerciamos buscando un beneficio, concepto abstracto que se materializa en dinero, a su vez otro concepto abstracto, el cual nos permite vivir un poco mejor y todo esto lo hemos hecho sólos en un abrir y cerrar de ojos. Nos hemos cargado una cultura milenaria y válida en poco más de un siglo y cuando en ese viajar incesante en una cabina con cuatro ruedas nos perdemos por un camino lleno de barro y trabacadas, cuando paramos para otear el horizonte y ver cual es la dirección correcta del camino que llevamos, bajamos de los coches y nos damos de bruces contra una piedra donde alguien ha colocado una teja por la que discurre un chorro de agua fresca que sirve para calmar nuestra sed, levantamos la cabeza y vemos un roble inmenso que por alguien ha sido truncado a la altura de tu cabeza y que por encima de ese corte han salido ramas jóvenes y vigorosas, que cada primavera floran y si hay suerte cuajarán y las bellotas servirán de alimento a algunos animales que a su vez servirán de sustento a ese alguien y su familia y esa rama cortada dará calor en las largas noches de invierno donde la naturaleza que parece muerta está reponiéndose de la asfixia del verano para volver nuevamente con todo su vigor en primavera y completar una vez más el ciclo de la vida.
Y ese chorro de agua que calma nuestra sed y ese roble que nos mira y nos pregunta porqué no cortas mis ramas y moldeas mi vigor, porqué no coges mis frutos, yo que te he ayudado a sobrevivir durante siglos, porqué me has relegado a estas laderas yermas donde no puedes entrar con esos monstruos que has inventado que quiebran el sosiego de todos los seres vivos, incluido el tuyo.
CHAPAZO
La palabra "chapazo" no viene en el diccionario de la Real Academia Española. Probablemente esté mal dicha, pero en el sur de la provincia de Burgos lo utilizamos como sinónimo de "chaparrón" (ignorando el que suscribe si la utilizan en otras regiones). Chaparrón es una voz onomatopéyica, quizás lo mismo podría decirse de "chapazo", al hacer alusión al ruido que hace la lluvia cuando llueve con mucha intensidad. Se suele utilizar casi siempre para referirnos a las tormentas de primavera y verano, cuando el campo necesita de un poco de agua para que culmine una buena cosecha y así decimos "si cayese un buen chapazo", "tenía que caer un chapacillo", "ha caído un buen chapazo".
Es una palabra que parece ser que no la utiliza mucha gente, que no debe venir del latín como parece ser que vienen la mayoría de las palabras, no se si es prerromana, no se si está bien dicho, no se si se ha inventado hace cuatro días o quizás sea una palabra que se lleva miles de años utilizando en el argot agrícola-pastoril que no da caché a las personas que la utilizan y por ello aún no ha sido recogida por los Ilustres Académicos de la Lengua Española, o lo que es lo mismo que decir Ilustres Académicos de la Lengua C a s t e l l a n a.
miércoles, 20 de abril de 2011
MUÑECA
MUÑECA
Voz de origen prerromano.
Parte del cuerpo humano.
Figura de mujer que sirve de juguete.
Maniquí.
Hito o mojón.
Existen muchos topónimos que hacen alusión a muñeca, moño, muñón, haciendo alusión a abultamiento, promontorio, pequeña colina, como por ejemplo: Los Millones (Los Muñones), en Baños de Valdearados; Corral de la Muñeca (Baños de Valdearados); Muñequillo (Coruña del Conde)...
Muno en vasco significa colina. Muñón también es utilizado en el sentido de parte abultada de plantas, animales o personas cuando se corta una parte de aquéllas o miembro de éstos.
Voz de origen prerromano.
Parte del cuerpo humano.
Figura de mujer que sirve de juguete.
Maniquí.
Hito o mojón.
Existen muchos topónimos que hacen alusión a muñeca, moño, muñón, haciendo alusión a abultamiento, promontorio, pequeña colina, como por ejemplo: Los Millones (Los Muñones), en Baños de Valdearados; Corral de la Muñeca (Baños de Valdearados); Muñequillo (Coruña del Conde)...
Muno en vasco significa colina. Muñón también es utilizado en el sentido de parte abultada de plantas, animales o personas cuando se corta una parte de aquéllas o miembro de éstos.
domingo, 17 de abril de 2011
ZAMOYO
Entre las localidades de Gumiel de Izán, Oquillas, Pinilla de Trasmonte, Santa María de Mercadillo, Tubilla del Lago y Villalbilla de Gumiel, existen topónimos donde se podrían localizar cuatro castros. En dichos castros, como en tantos otros de la región, quizás podría aplicarse, la cita de Estrabón, que hace alusión a la huida a las montañas de los celtas y que los romanos pusieron fin a esa situación obligándoles a bajar de las montañas a los llanos.
O lo que es lo mismo, después de la conquista del territorio por los romanos, tras la guerra los vencidos fueron esclavizados y obligados a cultivar la tierra, tierras lógicamente ya de los romanos y explotadas por los romanos a costa de los nativos, estás podrían ser las fotografías aéreas de tres de esos castros:





SED DE AMOR
sábado, 16 de abril de 2011
ALIAGA
ALIAGA-AULAGA
Se da practicamente en toda la península ibérica, en castilla, en toda la región, dando exactamente igual que se trate de un valle, páramo o montaña.
Sus hojas son muy apreciadas por el ganado.
Algunos pastores recuerdan que de niños les mandaban machacar la planta para dárselo al ganado como pienso.
miércoles, 13 de abril de 2011
RÉPLICAS EN JAPÓN
Los medios de comunicación nos dan todos los días noticias sobre nuevos movimientos sísmicos en Japón. La importancia de estos movimientos pasa desapercibida o no le damos importancia, parece que como ocurre con el olfato, gusto, oído o cualquiera de nuestros sentidos, el cerebro también se acostumbra a las noticias, y nos bombardean con un grado 7 en la escala de Richter y nadie se inmuta; ¡claro! como de ese grado solamente hay un par de decenas al año, pues no ha pasado nada, sobre todo si vivimos en una zona de escasa o nula actividad sísmica. Pero tiene su importancia, sobre todo en los doscientos kilómetros a la redonda donde se ha sentido su devastadora fuerza, donde, como ya sabemos, existen numerosas centrales nucleares, que al parecer aguantan las envestidas sin inmutarse, como los grandes colosos.
Los humildes mortales desde el Gran Tsunami de Japón al día de la fecha ya no tenemos la misma opinión de la energía nuclear, por mucho que salga hablando en la radio un Catedrático de Física Nuclear de una universidad del sur de España diciéndonos que es la forma más segura de obtener energía. Para ese catedrático, con todos mis respetos, decirle lo siguiente:
1.- Que él defiende la energía nuclear desde una postura parcial e interesada, aunque no lo parezca. Pues subjetivamente está defendiendo, aunque él no lo crea, su cocido, su prestigio, su trayectoria, su coherencia ideológica ante los demás y consigo mismo. Su defensa de la energía nuclear es tan parcial como la de cualquier político francés o empresario de la energía.
2.- Las centrales nucleares están costeadas con dinero público, pues ninguna empresa privada estaría dispuesta a desembolsar el capital necesario, con tanto riesgo y con las consecuencias futuras que tiene. De tal manera que si el desarrollo de la energía nuclear dependiese únicamente de la empresa privada y los poderes públicos se limitasen a garantizar la seguridad y los derechos de los ciudadanos no habría ni una sola central nuclear.
3.- La empresa privada únicamente se limita a recoger esa energía y gestionarla, es decir, a recoger los beneficios de lo que se hace con dinero de todos, no quieren ataduras (cementerios nucleares) ni responsabilidades, sólo se limitan a pasar religiosamente la factura a final de mes y recoger beneficios, de los cuales, una buena parte se llevan los directivos de esas grandes empresas que son nombrados por no se sabe muy bien quién, pero que al final uno se da cuenta que pasa como con los Directivos y Consejos de Administración de las Cajas de Ahorro y empresas cuasipúblicas, que sirven para asegurar la jubilación o un sobresueldo a antiguos dirigentes políticos.
4.- En las cuentas que se arrojan cuando se habla de energía nuclear no se incluye el costo que supone la gestión de los residuos nucleares, como la decisión de construir una central nuclear es política, como el dinero utilizado es de todos, el desmantelamiento de una central también es problema de todos y el coste lo asumimos todos, pero en otra cuenta, la cuenta de la que no se habla porque ni a políticos ni a gestores de esa energía, los que nos cobran la factura, no les interesa.
Conclusión, los ciudadanos van comprendiendo los riesgos de la energía nuclear; los ciudadanos no deberíamos asumir esos riesgos como un mal menor; los ciudadanos debemos apostar por las energías renovables no contaminantes y pasar capítulo a la energía nuclear; la gestión de la energía debe ser cuestión de estado y su distribución entre los ciudadanos debe ser equitativa y justificada y nadie debe tener derecho a utilizar la energía por el mero hecho de poder costearla. La energía lo mueve todo, sin ella la humanidad no podría producir los alimentos necesarios, en muchas zonas de la tierra se pasa hambre y es simple y llanamente porque no existe un reparto equitativo de la energía necesaria para producir los alimentos; en la lista de los DERECHOS HUMANOS lo mismo que está reconocido el derecho a una vivienda digna, a la integridad física y psíquica... habrá que ir incluyendo el DERECHO A LA ENERGÍA necesaria para subsistir con un mínimo de dignidad. Eso de privatizarlo todo no es bueno, es un error en el que caen hasta las políticas de izquierdas por haber fracaso en la gestión de lo público, eso de privatizarlo todo es el neocapitalismo más destructivo y voraz.
domingo, 10 de abril de 2011
MURALLAS CELTAS
Esta era la forma más rudimentaria de amurallar los poblados celtas, se colocaba una fila de grandes piedras en la base, sobre roca o sobre la tierra, según los casos, y a partir de ahí se hacían los muros de mampostería, la cubierta era de madera y en la mayoría de los casos tejas cocidas, pues conocían la técnica para la elaboración de objetos de barro y cerámica. Muy probablemente el interior de la muralla servía de pared para las casas. Por ello la mayoría de los castros sus únicos restos son ileras de piedra que marcan el perímetro de la muralla, pues las piedras superiores al utilizar como masa de unión arcilla; una vez de que pierden la protección de la parte superior el agua va arrastrando la arcilla y desploma los muros, las piedras pequeñas debido a la meteorización se van desintegrando y al final los únicos restos que quedan de los castros celtibéricos son trozos de tejas, escoria y las piedras de la parte inferior de la muralla y en algunos casos alguna pequeña necrópolis.
jueves, 7 de abril de 2011
QUINTANA MARÍA
miércoles, 6 de abril de 2011
martes, 5 de abril de 2011
SIERRA NEVADA
Los colores del cielo
no son bastantes
para pintar la casa
donde guardarte.
La amapola en el suelo
para que cantes
y la flor del romero
para lavarte.
Las paredes de lirios,
mezclados de azabaches
y un agua cristalina
donde mirarte.
Hijo de mis amores
¿dónde dejarte?
para que el mal
de este mundo
no te dañare.
Para que tu alma blanca,
blanca quedare
y de tus actos nunca
tu renunciares.
¡Ay hijo de mi vida!
Cómo esperarte
a que seas un hombre
donde apoyarse.
Dura tarea queda
para enseñarte
que lo bien hecho
es lo que vale.
Por eso hoy suplico,
suplico al cielo,
que me enseñe a enseñarte
cuál es lo bueno,
que me enseñe a decirte
lo que te quiero.
Que me guíe de noche
y sin luceros
y que me de las fuerzas
para que yo y tu madre
podamos verlo.
03-08-92
no son bastantes
para pintar la casa
donde guardarte.
La amapola en el suelo
para que cantes
y la flor del romero
para lavarte.
Las paredes de lirios,
mezclados de azabaches
y un agua cristalina
donde mirarte.
Hijo de mis amores
¿dónde dejarte?
para que el mal
de este mundo
no te dañare.
Para que tu alma blanca,
blanca quedare
y de tus actos nunca
tu renunciares.
¡Ay hijo de mi vida!
Cómo esperarte
a que seas un hombre
donde apoyarse.
Dura tarea queda
para enseñarte
que lo bien hecho
es lo que vale.
Por eso hoy suplico,
suplico al cielo,
que me enseñe a enseñarte
cuál es lo bueno,
que me enseñe a decirte
lo que te quiero.
Que me guíe de noche
y sin luceros
y que me de las fuerzas
para que yo y tu madre
podamos verlo.
03-08-92
lunes, 4 de abril de 2011
CASTRO
La palabra castro, que no me cabe ninguna duda que procede del celta, es sinónimo de poblado, asentamiento, dominio sobre un territorio por parte de una familia o grupo de familias unidos por vínculos de sangre principalmente y excepcionalmente por vínculos de hospitalidad o adopción en el sentido que le damos en la actualidad a esta palabra. Creo que en los primeros años de La Tene las diferentes tribus que se asentaron en las estribaciones occidentales Sierra de la Demanda por su superioridad militar no necesitaron de fortificaciones y por consiguiente castro significaría poblado, posteriormente, probablemente debido a tensiones entre las diferentes tribus, algunos castros se fotificaron y sin duda alguna, la inmensa mayoría de los castros se fortificaron con la invasión de los romanos. Es en este último periodo comprendido entre III, II y I a.C. cuando los castros pasan a ser sinónimo de fortaleza, creo que muy rudimentaria consistente únicamente en elegir un promontorio de difícil acceso por todos sus lados menos por uno donde construían una muralla consistente en quitar tierra del lado exterior para amontonarlo en el lado interior de tal manera que se producía una elevación del terreno en el lado interior y en el exterior un foso, el paredón formado tenía una anchura considerable, varios metros, y sujetándose el conjunto con muros de mampostería.
El terreno elegido solía tener extramuros una o varias fuentes o manantiales y muy probablemente se repartieron las diferentes tribus los valles o parte de un valle. Entre la Demanda, Moncayo y Sierra de Ayllón se pueden observar infinidad de castros en las cabeceras de los ríos, todos ellos similares en sus características, sin duda su economía estaba directamente relacionada con la ganadería y probablemente las pequeñas vegas de los ríos estaban cultivadas.
El número de castros es tan importante en esta zona que podríamos afirmar que existía un sustrato de población celta a la llegada de los romanos más importante que el que existe hoy en día en el conjunto de la región. Que el imperio romano nunca pudo someter en su totalidad a sus pobladores, por ser de carácter libre y preferían la muerte antes que verse derrotados, por lo que la mayor parte de los castros fueron arrasados hasta el punto de que en términos actuales podríamos estar hablando de un auténtico genocidio.
Respecto al idioma, muchísimas de las palabras del celta se siguen utilizando por los pobladores de la zona y otras muchas las adoptó como suyas el latín y muy probablemente el castellano nace de la fusión de estas dos lenguas, fusión que tardó más de diez siglos en producirse y que no es otra cosa que la lengua de los dominadores y la lengua de los dominados; dominadores que tras generaciones pasan a ser autóctonos y dominados que por avatares de la historia dejan de serlo. El castellano son dos lenguas confundidas en una sola y no una lengua derivada del latín de ahí que sea tan extraordinariamente rico en sinónimos.
¿Esto es fruto de la imaginación? probablemente sí, pero si no lo es, habrá que reordenar muchos conceptos. Hay mucha gente que está convencida de la importancia que ha tenido la cultura celta en la península y llevan muchas décadas diciéndolo, hasta ahora hemos querido pensar que el imperio romano era el punto de referencia, pero este punto de referencia es conocido, otros puntos de referencia no tan conocidos van aflorando muy lentamente, poco a poco los conoceremos y así nos conoceremos un poquito más a nosotros mismos.
domingo, 3 de abril de 2011
ESTRABÓN
(27) (Tagós) El río abunda extraordinariamente en peces y ostras. Nace entre los Keltíberes y cruza por entre los ouéttones, karpetanoí y lysitanoí, corriente hacia el Occidente equinoccial. Va paralelo al Ánas y al Baítis hasta cierto punto; luego sepárase e ellos, corriente hacia la costa merdional.
...../.....
(28) Hacía la parte de Oriente los kallaikoí limitan con los ástoures y con los kelt-íberes, y los demás con los keltíberes.
Después de ellos están los karpetanoí, hacia el septentrión, y más lejos los ouéttones y ouakkaíoi por entre los que corre el Doúris. En Akontía, ciudad de los ouakkoíoi está el paso del río.
......../......
Sígueles el Doúrios, de lejanas fuentes, que pasa junto a Nomantía y otras muchas ciudades de los keltíberes y ouakkaíoi. Los gandes navíos pueden remontarlo por espacio de unos ochocientos stadios. Después vienen otros ríos. Tras ellos el Léthes llamado por unos Limaía y por otros Belión. Éste también viene del país de los keltíberes y ouakkaíoi. lo mismo pasa con el Baínis, llamado por otros Mínion, el mayor de todos los ríos de Lysitanía, e igualmente navegable en unos ochocientos stadios.....
(30) En la región sita entre el Tágos y el país de los ártabroi habitan unas treinta tribus. Esta región es naturalmente rica en frutos y en ganados, así como en oro,plata y muchos otros metales; sin embargo, la mayor parate de estas tribus han renunciado a vivir de la tierra para medrar con el bandidaje, en luchas contínuas mantenidas entre ellas mismas, o atravesando el Tágos, con las provocadas contra las tribus vecinas. Pero los rhomaníoi, poniendo fin a este estado de cosas, las han obligado en su mayoría a descender de las montañas a los llanos, reduciendo sus ciudades a simples poblados, mejorándolos también con el establecimiento de algunas colonias entre ellos. El origen de tal anarquía está en las tribus montañesas, pues habiendo un suelo pobre y carente de lo más necesario, deseaban, como es natural, los bienes de los otros. Mas como éstos, a su vez, tenían que abandonar sus propias labores para rechazarlos, hubieron de cambiar el cuidado de los campos por la milicia, y, en consecuencia, la tierra no sólo dejó de producir incluso aquellos frutos que crecían espontáneos, sino que además se pobló de ladrones.
sábado, 2 de abril de 2011
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